La persona de que hablaré es mi mamá. Se llama Sandra Cifuentes. Ella es una persona bien amorosa, llena de vida y trabajadora. Mudó a los Estados Unidos cuando tenía 15 años. Siempre fue una buena estudiante. Cuando empezó en la universidad quería ser farmacéutica. Desafortunadamente, era difícil, así que comenzó a estudiar para ser maestra.
Ella comenzó como una maestra del jardín de infancia, pero cuando saco la maestría, empezó a trabajar con niños que tienen necesidades especiales, pero más específicamente, el autismo. Quería entrevistar a mi mamá porque quiero saber qué tipo de rutina ella tiene y cómo ella se prepara cada día. Siempre le he gustado jugar y ayudar a los niños. Por eso quiso ser una maestra. Cuando consiguió su licenciatura, empezó a trabajar como maestra de jardín de infantes. Después de cinco años siendo maestra, volvió para la universidad para conseguir la maestría. Con eso pudo ella trabajar personalmente con otras compañías que proveen evaluaciones para niños. Mi mamá evaluaba niños para ver si estaban listos para seguir al siguiente paso, la escuela primaria. Después de algunos años evaluando, tomó algunas clases de ABA (Análisis aplicado de conducta). Cuando recibió su certificado, ella pudo trabajar con los niños de primera mano.
También pudo establecer su propia agencia. Con eso, mi mamá pudo recibir casos de niños que tienen autismo directamente del departamento. Ya no tenía que ir para las otras agencias. Hasta el día de hoy ha tenido mucho éxito y sigue teniendo éxito con la estrategia de trabajo. La “estrategia natural”. Esta estrategia ayuda conectar conceptos con rutinas de la vida diaria del niño. Los juguetes y actividades enseñan nuevos conceptos apropiados para el niño. Ayuda involucrar el niño en la rutina familiar y también provocar el aprendizaje mientras el niño juega. Esto hace que los niños aprenden de ellos mismos y también los guía para asegurar que la educación que ella le está dando a los niños sale con buen resultados. puede sonar simple, pero en realidad, no lo es.
Mi mamá sigue teniendo ese pasión que tenía cuando comenzó ser maestra por primera vez. Le encanta enseñar a los niños y estar cerca con ellos. Ella también dice que le gusta ayudarlos para tengan un futuro mejor y para que los niños de necesidades especiales puedan contribuir en la comunidad.