Yo he jugado futbol desde que tenía 15 anos y siempre va ser mi deporte favorito. Siento que es algo que disfruto mucho y me ayuda mantener mi cuerpo en forma. Desde mis anos adolescentes jugaba por un equipo, hasta que llegue a los veinte años, porque el tiempo desafortunadamente no me alcanzaba. La mayoría de los hombres de mi familia también juega futbol. Mis tíos, mi hermano, mi papa, y mi abuelo en sus años adolescente siempre eran fanáticos del futbol y yo nunca los vi jugar, menos a mi hermano hasta que al fin llego el día y pude ver jugar a todos. Mi primer partido de futbol con mi familia justo al principio del verano, en Mayo, en Randall’s Island.
Al llegar a la cancha ya vimos a los jugadores de ambos equipos alistándose para empezar el partido. Algunas personas están estirándose para no tener calambres durante el partido y salir lo más saludable posible o sin heridas y otros practicando con el balón pasándoselo entre ellos. La cantidad de goles durante el partido hizo sentir mucha emoción porque fueron muchos. El partido termino quedando 5-3 entonces en total fueron 8 goles y todos entraron a orden que hizo que el partido emocionante. Ellos nos metieron el primer gol y cuando eso paso, uno se miraba al otro preguntándose, como podemos hacer para meter uno nosotros y cómo podemos ganar este partido.
En resumen, el partido sigue, nosotros comenzamos nuestra jugada y metimos uno nosotros. La felicidad se sentía por todo el cuerpo y uno se animaba por más goles. Ahí si nos emocionó a todos y seguimos jugando con la animación que nos dio ese gol . Se le notaba al otro equipo que también querían e iban por más. Ambos íbamos por la misma meta así que era jugada tras jugada y allí ellos alcanzaron lo que querían. Metieron su gol. Ya el partido iba 2-1 y así seguía sucesivamente hasta el quinto gol.
Ya cuando el partido quedo 5-5 nosotros pensamos que quedo empatado, pero por otra parte el profesor nos indica que esto se va hasta extra tiempo y si seguía empatado llegaba a penales. Los dos equipos no nos esperábamos eso pero yo me emocione y trate de animar a mi familia a ir por más porque ya ellos estaban cansados. No nos podíamos rendir ahí. Ya tomamos agua, nos sentamos por 15 minutos para descansar los pies un rato y otra vez a la cancha. Hablamos como equipo para poder ganar este partido. Mi hermano y yo estuvimos muy feliz porque este partido fue con nuestro papa y tío y eso es algo muy especial para uno, y más si es el primer partido. El otro equipo se notaba que querían que esto llegara a penales pero nuestro plan fue lo contrario. Queríamos ganar en extra tiempo para no arriesgar nada. Ahí cuando entramos y llegamos animados, metimos tres goles. Como resultado, habíamos metido uno en el primer tiempo y dos en el segundo. Era difícil llegar a los otros dos goles porque en el segundo tiempo llego el otro equipo estuvo listo para empatar pero justamente le metimos los goles en el momento indicado cuando ellos se despistaban.
En conclusión, este partido es una memoria muy inolvidable para mí, y seguimos jugando todo en familia todavía pero no solo fue por la ganada que me gusto este partido específicamente, si no que fue la primera experiencia que pude jugar con mi papa, mi tío y mi hermano y fue una experiencia que me voy acordar toda la vida y una historia que siempre me va a encantar expresar.