Franddy Rodríguez, un joven de 23 años que llegó a Estados Unidos con su madre cuando solo tenía 3 años, ha demostrado que los sueños se hacen realidad cuando hay esfuerzo y buena voluntad. Cuando su madre llegó a los Estados Unidos desde la República Dominicana sin la ayuda de su padre, quien decidió quedarse porque no quiso deja prestigioso trabajo como abogado para comenzar una nueva vida y una carrera no tan destacada en los Estados Unidos. La madre de Franddy, como muchas madres luchadoras hispanas, fue madre y padre para él, y lo más importante fue que le inculcó metas y valores. Desde entonces él se ha esforzado por ser alguien en la vida para alegrar el corazón de su madre.
Todo comenzó cuando Franddy tenía unos 14 años y fue elegido para jugar béisbol en una prestigiosa escuela privada, La Salle Academy, bueno, ese fue el comienzo de una dura decisión y aceptación en su vida. Mientras pasaban los años en la academia, su sueño de ser pelotero parecía lejano e imposible de alcanzar pues no creía que pudiera tener un futuro como beisbolista. Pero solo pensar en todo el esfuerzo que puso su madre. Pensar en lo que habían sufrido los dos sin un cabeza en la familia lo motivó a tomar otra dirección.
Hablando con Franddy, reconoció que, como cualquier madre trabajadora que llega a los Estados Unidos con un niño pequeño, no tiene más remedio que luchar y trabajar para estabilizarse a sí misma y a su hijo. Es por eso que ser criado por su madre no le afectó porque desde pequeño vio lo luchadora que era su madre. Eso le dio la ética y las ganas de trabajar que tiene hoy. Pero no todo en su vida era claro de entender. En un momento de su vida, Franddy no sabía que iba a hacer con su vida, ni qué carrera iba a seguir ya que el sueño de ser beisbolista no era realista, pero todo cambió cuando ingresó a la universidad de Staten Island .
Desde entonces inició su sueño de carrera para ser médico general de medicina nutritiva o de emergencia. En la entrevista le pregunté a Franddy cómo se siente ahora de encontrar un nuevo propósito en su vida . Respondió con estas palabras “Siento que estoy soñando y que el esfuerzo de mi mamá no ha sido en vano”. Como podemos ver, el está sumamente orgulloso de todo lo que ha logrado durante los años que se ha estado preparando y ahora se está preparando para ingresar a la escuela de medicina estudiando para el MCAT. Aunque Franddy se siente así ahora, hubo un momento en la vida que estaba desanimado, pues lo más duro que tuvo que dejar fue el béisbol que fue su primer amor”.
Franddy menciona ”Reconocí que el tiempo que le dedicaba al juego no me permitía concentrarme en mis estudios. Por eso tuve que alejarme de ciertos amigos que no eran una buena influencia para mí, para enfocarme en mis metas”. Con esto en mente, siente que todavía tiene mucho que aprender y lograr en su vida. Franddy admite que a veces duda de poder hacerlo, pero solo recuerda todo el esfuerzo de su madre por venir a Estados Unidos. “Ese sentimiento de gratitud por mi madre es más fuerte que cualquier sentimiento de negación que puedo tener.’’ Por eso, uno de sus objetivos cuando sea médico es seguir mejorando primero. Después piensa abrir su propia clínica en República Dominicana para ayudar a los que son menos afortunados, y ayudar a las personas que no tienen seguro médico a tener un lugar a donde pueda acudir para servicios médicos. Franddy terminó su entrevista agradeciendo a su madre por ser tan buen ejemplo a seguir y a la personas que no ha dudado de su sueño, y lo ha apoyado con palabras de elogio.