Mi prima tiene cuatro hermanos y dos hermanas. Tiene 19 años y está estudiando negocios. Vive con su madre y padrastro. Su padre vive en Ecuador desde que ella tiene 3 años. La comunicación entre ellos es muy poca. Ella es una persona responsable, amable y le gusta ayudar a la gente. Siempre le gusta mantenerse activa y ocupada. El gimnasio es uno de sus lugares favoritos, donde le gusta pasar varias horas. Hace un año perdió a su bebé cuando apenas tenía dos meses de embarazo y esto le ha cambiado la vida totalmente. Su novio ha sido un gran soporte en su vida y siempre quiere lo mejor para ella.

Hace un año su novio y ella estaban muy felices porque iban a tener su primer bebé. Al principio ella quería abortar porque no contaba con el apoyo de su familia y se sentía muy sola.  También tenía miedo de entrar en esta nueva etapa de su vida porque era aún joven. Después de reflexionar y hablar con sus padres y novio decidió enfrentarse y tener al bebé. Lo esperaban con mucha felicidad. Alos dos meses de repente en su casa empezó a tener mucho dolor, empezó a sangrar y se fue al hospital, donde le dijeron que había perdido a su bebé. Esto fue muy doloroso para ella y su familia ya que todos lo esperaban con emoción. Toda la familia le dio su apoyo y sobre todo estaban ahí con ella. La pérdida de su bebé fue difícil para ella y su novio. Estuvo por muchas horas en el hospital con dolor y los doctores no podían darle medicamentos. 

Esta noticia  hizo un impacto en su vida porque dejó de ir al gimnasio, ya no siguió  con su dieta y dejó de estudiar un semestre porque no se podía concentrar. Entró en una fase donde no quería comer y se encerraba en su cuarto por días. Decidió asistir a terapia cada semana y esto fue muy positivo para ella porque pudo hablar y expresar cómo se sentía. La relación con su familia cambió. Su madre y padrastro hablaron con ella y se dieron cuenta de cómo se comportaban. Hablaron sobre sus diferencias y llegaron a la conclusión de que al final son familia y son los que siempre van estar ahí para apoyarla en la buenas y las malas. 

A pesar de todo lo que paso su sueño de ejercer su propio negocio aún continúa, ella quiere viajar por el mundo entero. Nuevamente se animó a registrarse a clases y terminar su último semestre para poder graduarse. Aunque siempre va a recordar lo que le pasó sigue siendo positiva y con el apoyo de la gente que la quiere. Por el momento no tiene planes de ser madre. Empezó a continuar con su vida saludable, con su dieta, gimnasio y también aún sigue asistiendo a terapia.