En el año 2019, cuando yo cumplí 20 años, tomé la decisión para adoptar una perrita. Yo quería una responsabilidad nueva y como nunca pensada tener hijos, preferiría a comprar una perra. Siempre tenía una conexión con los animales, pero nunca tenía un perro que fuera mía y mía sola. Mi madre adoptó una perra y yo la llamé, Coco Chanel, pero, yo sabía que Coco no era mía completamente. Entonces, mi cumpleaños era, el 18 de junio, y empecé las luchas para buscarme una perra el mes de mayo. 

Bueno, para empezar, cuando llegó mayo, yo y mi mamá fuimos para muchas agencias buscando el perro perfecto. Primero, yo quería un perro chiquito. Nunca quería una perra como la perra de mi mamá, Coco. A mí me intereso los perritos y también en este momento, yo estaba viviendo con mi abuelita, y como ella es mayor, prefería un perrito chiquito que ella puede caminar por si acaso. Así que, yo y mi mamá fuimos a agencias como ASPCA pero no había perritos pequeños en esta agencia. Yo aprendí en este tiempo que no había muchas agencias de adopción en Nueva York en absoluto. Por esta razón yo traté a comprar un perrito, pero cuando iba a tiendas como, “Puppy Paws, “Shake a Paw”, y “Empire Puppies”, las tiendas no me cayeron bien. No me cayó bien porque, estas compañías son compañías que no aprecian los perros ahí sinceramente. Cuando yo fui, especialmente a “Shake a Paw” yo vi muchos perros en jaulas, hasta perros grandes. Yo vi como tres perros de raza grande estaban metidos en una jaula pequeña juntos. Me dio mucha pena ver las condiciones de esos perros y también me di cuenta de que los empleados no sacaban los perros a caminar los perros. Ellos dejaron que los perros hicieron sus necesidades en las jaulas. Después de todo, la última razón que me di cuenta de que no suportada estas tiendas fue que, en todos de los lugares, los perritos pequeños costaban $1,200 a casi $6,000. Eso se significa que estas gentes que trabajan aquí, solo está buscando dinero, no le importaba a buscar una casa buena para los perros y me fui. 

Por desgracia, estaba cansada de buscar un perro. No quería pagar tanto para un animal. Hasta que pensé en comprar un gato, porque sé que los gatos no cuestan mucho dinero, pero mi abuela no les gusta los gatos. Mi abuela dices que los gatos son malos para la suerte y por esta razón no fui a comprar uno. Después mi mamá me dio la idea a adoptar mi perro en las mismas agencias que ella adoptó a Coco. Coco vino de una agencia que se llama, “North Shore Animal League” en Port Washington, Long Island. Yo nunca pensé ahí a esa agencia porque es muy lejos de la casa de mi abuela que se queda en Far Rockaway. Pero como quería tener mi perro antes del mi cumpleaños, me fui “North Shore Animal League” con mi mamá. Cuando llegué teñía que esperar en una línea para entrar. Yo estaba muy impaciente y tenía ganas de correr dentro la agencia. Cuando ya llegué a la entrada, me llegó ese olor de perros que me dio alergia. Sé que es raro tener alergias a los animales, pero a mí no me importa por que el amor que yo tengo para los animales es más fuerte que mis alergias. Entonces, estaba caminando y caminando, vigilando a todos los perritos dentro las jaulas. Me di cuento que las gentes estaban adoptando rápido entonces no tenía mucho tiempo para tomar una decisión. Llegó mi mamá con una perra en sus manos, una perra blanca y negra. Yo miré la perra y seguíir caminando por que ya vi que esa perra no fue pequeña como la quería mi abuela. Yo caminé y caminé hasta que no había más perros, solamente la perra que tenía mi mamá agarrada yo todas las gentes le preguntaban, “¿Estas escogiendo esa perra?” Y mi mamá respondo, “Si”. Yo la miré a mi mamá porque ella también sabía que esa perra iba crecer grande. Bueno, me fui con esa perra blanca y negra por que fue como el destino que me dijo, “llévate esta perra que estaá perra es para ti.” Por eso, me fui con mi perrita, la adopté, y la llamé Luna. 

El 8 de junio, yo lleve Luana a mi casa. Pagué los pagos de $500 de adopción. En vez de las tiendas como “Shake a Paw” que carga casi $1,200 para compra un perro.Si no las sabias North Shore es una agencia que rescata los perros y muchas veces los perros vienen con enfermedades como resultado Luna también tenía enfermedades. Cuando adopte a Luna, ella tenía tres meses y fue media grande. El estómago del Luna estaba hinchada de una infección que tenía por dentro. También tenía la piel seca. Mi primera responsabilidad fue a cuidad mi perrita y ayudarla a combatir estas enfermedades. Tenía que vacunar la, comprarle las medicinas y darle baños médicos para su piel. Yo sufrí mucho los primera meses cuidando a mi Luna.  Sin embargo, ella se curó de las sus enfermedades.  

Pero esa perra no tenía educación, no hacía caso, ya destruyó casi todos de mis cosas. Mis zapatos, camisetas, cargadores, alambres, hasta mi peluche. Una vez, vi que ella me comió un peso. Por este motivo, le compre una jaula para Luna y cuando se portaba mal, y la castigo y la mando a dormí en la jaula. Otro problema que encontrar fue que la raza de Luna arroja mucho pelo. Por consiguiente, todos los días yo tenía que barrer por mis alergias. También, le doy baños cada semana para que ella se queda limpia. Luna era una responsabilidad que nunca tenía y fue un sacrificio también.  Mi abuela también sacrificó mucho cada vez que caminaba Luna. Luna como es media grande, ella arrastra a mi abuela y como ella es débil fue difícil. Finalmente, mi vida social cambio enteramente. Ya no podría salí cuando querías porque mi familia trataba Luna como hija y las hijas no se dejen en la casa sola. Pase los meses cuidando una perra que se portaba como una niña de verdad. 

Cuando llego el mes de octubre me di cuenta de que fue la última chance yo tenía para devolverle para la agencia. Luna duro mucho tiempo para cambiar y hacer caso. Fue difícil porque mi abuela vive en un apartamento entonces yo tenía que caminar Luna lejos para que ella pudiera caminar y gastar energía. Aun así, Luna todavía era terrible. Yo caminaba esa perra desgracia casi cuatro veces al día y todavía orinarías la casa. Yo estaba harta. Bueno, mi mamá que estaba cansada de escucharme quejar me dijo, “Yalenice, voy a venir a recoger Luna para devolverle porque ya veo que tú no la puedes cuidad.” Ay, si pudieras ver mi cara cuando escuché eso. Dique que me van a quitar mi perra. Eso no iba pasar porque en ese momento yo sabía que yo quiera mi perra mucha y nadie me la van a quitar. Yo llore y pedí mi mamá que me diera otra chance y así fue.  Cuando yo supone que me iban quitar mi perra, el amor que yo tenía para Luna se transformó a amor de madre. Digo amor de madre porque cuando yo tengo hambre, le doy comida a Luna por acaso ella tienes hambre también. Si yo estoy durmiendo, ella estas durmiendo. Cuando estoy triste, también Luna es triste. Prometí a mi mama que iba hacer todos en mi poder a cuidar mi Luna. 

En conclusión, en vez de recordar me de todos los sufrimientos que pasé con Luna, yo aprecio todos los momentos que paso con ella. Me di cuenta de que ahora mismo y todavía vale, Luna es mi única amiga. Luna es una perra simpática y no haces caso, pero el amor que ella tienes para mi es un amor verdadero. Nunca mordió a mí, o a mi abuela, y otros perros tampoco. Ella es una perra dulce y con su propia personalidad y tienes buenas relaciones con mis primos menores. Luna es muy acerca conmigo. Ella llores si no me ve y siempre quieres esta acerca mía. Luna reconoces que yo soy su mamá y nosotros siempre estamos juntos. Yo la lleva al parque, la playa, y la tienda “Petco” para conseguir los juegos que ella prefieras.  Yo sufrí mucho los primera meses de cuidando Luna, sin embargo, la relación que tenemos es fuerte y amoroso. Todo el mundo debe a adoptar un perro porque está salvando el perro y el perro estas salvando te también.  A fin de cuentas, estoy contento con mi perro. Por la primera vez tengo algo que es mía y mía solamente. Antes de adoptar mi perra, yo nunca quería hijas ahora, Dios me doy una hija en forma de una perra. Ahora mismo, Luna tienes dos años y vas a cumplí tres años el cinco de marzo. Espero a vivir los años que vienen con mi hija y mi mejor amiga.