Keidy Peralta tiene 19 años, es una estudiante de segundo año en el programa de negocios de Lehman College, una Universidad pública de Nueva York. Sus padres nacieron en la República Dominicana y ella es dominicana–americana; le da mucho orgullo serlo. Cuando Keidy estaba en la escuela secundaria ella era la estudiante con las calificaciones más altas de su clase, con sus buenas notas y su esfuerzo en la escuela ella me enseñó que si tu trabajas duro es muy probable que recibas reconocimiento.
En el 2018, Keidy Peralta tenía 17 años cuando el consulado de la República Dominicana en Nueva York le mandó una invitación por correo electrónico para recibir un reconocimiento por ser una estudiante meritoria. Cuando vio su invitación ella se sorprendió y, al mismo tiempo, se sintió agradecida y honrada porque el reconocimiento era a nivel nacional: “fue la primera vez que una organización de mi país reconociera mis esfuerzos académicos. Fue un momento inolvidable porque cuando yo era pequeña era muy difícil para mí sacar buenas notas. Entonces, cuando recibí esta invitación, me sentí orgullosa de mi misma”, dijo Keidy. Solo ella y dos compañeras de su escuela, High School for Law and Public Service, habían sido seleccionadas para este reconocimiento.
Keidy había tenido dificultades académicas desde la escuela primaria. Cuando ella entró a la secundaria, le advirtieron que si no podía mejorar sus notas ella iba a tener que asistir a Summer School (un programa de verano para estudiantes que necesitan mejorar académicamente) o repetir el año. Eso le dio motivación para mejorarse y comenzó a pedir ayuda a sus maestras. Al final del año de escuela ella ya tenía algunas de las notas más altas de la clase. Este evento forzó a Keidy a siempre estar concentrada en tener buenas notas, lo que la llevó a recibir el reconocimiento para el que la invitaban.
Al ver la invitación, su primera reacción fue decirle a la gente cercana a ella: “Mis padres y amigas se sintieron muy orgullosas de mí y me felicitaron por este reconocimiento”, respondió Keidy. El evento ocurrió en una universidad y Keidy invitó a su mejor amiga, Carolin. Durante el evento ellas se tomaron fotos para no olvidarse de este momento especial.
“El evento impactó mi vida personal porque me di cuenta de que los esfuerzos tienen recompensa en el futuro”, dijo Keidy. En su futuro, Keidy piensa que este evento le va a impactar porque le va a dar motivación para cumplir sus sueños y metas de ser exitosa en la vida, para que los padres de ella se sienten más orgulloso de lo que se sienten ahora.
Para llegar a recibir este reconocimiento, Keidy tenía sus estudios como su primera prioridad para sacar buenas notas. Ella aprendió que una nunca debe rendirse porque los esfuerzos tienen su recompensa: “Esta fue la perfecta oportunidad de recordar que yo puedo cumplir mis metas y compartir esa felicidad que yo tenía cuando me dieron el reconocimiento de estudiante meritoria”, comentó Keidy. Y ahora Keidy en la Universidad ha aprendido que no importa si tienes notas altas o si eres la más avanzada en tu clase, la única cosa que importa es aprender y usar la oportunidad de ir a una universidad para mejorar tu vida y mejorar tu intelecto.