Esta persona es Diana Bonilla, mi madre. Es una persona con un corazón muy grande, echada para adelante, con mucha motivación y fuerza, madre soltera y trabajadora. Es muy rebelde cuando tiene que serlo pero todo lo hace con razón. Tuvo una infancia muy triste y tuvo que enfrentar obstáculos difíciles por culpa de su madrastra y su padre. Hizo muchas cosas por enojo y para llamar la atención.
Mi madre vivió con su padre y su madrastra desde los 8 años. La madre, mi abuela Amparo, se mudó a los Estados Unidos cuando era muy joven. Nunca fue criada con el amor de una madre y eso la puso muy triste. Mi mamá vivió con mi abuelo hasta los 20 años. El padre de mi madre era muy estricto con ella y eso provocó su rebeldía, pero también su crianza con su madrastra Carmen. Carmen tenía muchas diferencias con mi madre y sus hermanos. Como mi mamá era hija de otra mujer, Carmen siempre estaba enojada con mi mamá y la maltrataba de muchas maneras, como con la comida, la ropa, etc. Mi mamá siempre fue rebelde desde que la mamá se fue. La rebeldía que tenía mi mamá era por culpa de Carmen y lo que más le provocaba rebeldía era que su papá no le creía. El padre de mi madre seguía trabajando desde la mañana hasta la noche. Ella le contó todas las cosas que Carmen le hizo y nunca la creyó. Esto terminó con ella huyendo de casa y sin ir a la escuela. Cuando no iba a estudiar, estaba en la casa de sus primos y con su familia jugando. Nunca estaba haciendo nada malo.
Mi madre no tenía miedo de que el padre se enterara de ella porque lo hizo con razón. El tiempo pasó volando ya la edad de 20 años mi abuelo se cansó de tanta rebeldía con mi mamá y le pidió una cita para venirse a los Estados Unidos a vivir con su mamá. No se arrepiente de que mi madre fuera rebelde por una causa.
Hoy en día mi mamá da consejos a la gente por lo que pasó. Ella da el ejemplo de que las personas escuchan a sus hijos y que siempre hay dos versiones de todo, los niños son una prioridad en la vida. Mi madre ha aprendido que siempre tiene que escuchar a los demás, especialmente a sus hijos, como yo, que soy su hija. Fue una experiencia que le enseñó mucho y es la mujer que es hoy en día. Todas las cosas suceden por una razón y él aprendió a superarla. Ve el pasado con tristeza pero mira al futuro con ganas de vivir y triunfar y luchar.