Mi padre se llama Víctor Toledo. Él nació en Comas, un pueblo en Perú cerca de la ciudad de Lima. Cuando era niño, su sueño era ver a la selección nacional de Perú jugar un partido de fútbol. Cuando tenía 32 años, su sueño se hizo realidad cuando fue a ver a Perú jugar un partido de clasificación para la Copa del Mundo. Fue un momento especial para mi padre. Él fue con su hermano mayor y su padre y vio el partido en un estadio cerca de la capital de Lima. Cuando escuchó la noticia que Perú se clasificó para jugar en la Copa del Mundo, lloró y llamó a todas nuestras familias de lado de él y también a mi mamá. Recordó el momento en que Perú anotó el gol ganador que los llevó a la Copa del Mundo. Consideró que el día en que recibió la noticia y dijo que nunca lo olvidará en su vida.

Un día en 1982, mi papá, tío, y mi abuelo fueron al estadio de fútbol a ver a Perú jugar por la oportunidad de estar en la Copa del Mundo. “Soy muy fanático al fútbol desde muy pequeño, mi padre me llevaba a los estadios y me encanta el fútbol”, contó mi papá. Dijo que mi tío tenía que comprar los tickets, mientras mi abuelo y él tenían que ir al estadio muy temprano para conseguir la mejor ubicación. Ellos estaban muy emocionados cuando empezaron a cantar el himno nacional.

El partido fue muy bonito, y todos estuvieron emocionados. Ellos lloraban en el estadio cuando el equipo hizo el primer gol. Cuando fueron a comprar perros calientes, mi abuelo tenía mucha hambre. Todos salieron contentos del estadio porque Perú ganó. Mi papá me dijo que con ese partido, Perú se estaba clasificando para el mundial y éste fue uno de los mejores momentos en su vida.

Cuando Perú se clasificó para el Mundial otra vez en 2018, mi papá se sintió muy feliz. “Me sentí muy feliz porque nunca pensé que Perú podría clasificar a la Copa del Mundo de Rusia ya que nosotros estábamos esperando mucho tiempo”, comentó mi papá. Vio cómo la gente lloraba de alegría especialmente los que son muy fanáticos del fútbol. Nadie durmió ese día. Había muchas fiestas en todas las calles en Perú. Él pensaba en cómo podría ir al mundial para ver a la selección porque costaba mucho dinero.

Mi papá cree que ambos mundiales fueron muy bonitos. Piensa que el mundial en 1982 fue más lindo porque fue al estadio con su hermano y papá. Cuando Perú se clasificó para el mundial en 2018, solamente vio los partidos en la TV en la sala. A veces, no lo veía por TV y no fue a ningún lugar para celebrar la clasificación del Perú. Comentó que los mundiales dieron mucha alegría a todos los peruanos.

Cuando él fue al estadio, fue un evento muy especial que nunca olvidará. Esta clasificación les alegró a todos los peruanos, especialmente a mi papá: “Cuando tu país se clasificó a un mundial, conociste a mucha gente,” comentó mi papá, “Y también nosotros cuando vamos a ver el partido nos ilusionamos mucho y nos ponemos tristes si el equipo pierde. Por eso especialmente, Perú fue considerado la mejor barra del mundial.”

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