Mónica Cardona viene de una ciudad llamada Pereira que está ubicada dentro del pueblo cafetero de Colombia. Tiene dos hijas por las que ha trabajado y luchado toda su vida, para brindarles mejor vida de la que ella desafortunadamente no pudo tener en su niñez. Ella es una mujer guerrera y echada para delante. Vino a este país de Colombia en busca de una mejor vida para ella, su mamá y su primera hija en el momento. Siempre le había parecido que Estados Unidos era un país que le podía dar mejores oportunidades y tener ese “American Dream” que tanto había soñado. Su sueño no solo termina en poder estar en Estados Unidos, aunque sea solo como inmigrante. Su sueño era poder volverse ciudadana americana y ser parte de este grandioso país. Esta es la historia de cómo logró su mayor sueño.
Mónica vivía en Colombia en una ciudad llamada Pereira. vivía con su mama, y su hija. Al ver que era una familia de bajos recursos su sueño era poder ir a Estados Unidos a tener una oportunidad para poder superarse. Al hablar con una tía que vivía en Nueva York, tomó la decisión de irse a este nuevo país para poder ganar mejor. Llegó a Estados Unidos el 18 de agosto de 1992, sintiéndose triste al tener que dejar su mamá y su hija atrás en Colombia, pero a la vez con fuerzas y ganas de hacer ese sacrificio para darles mejor vida. Pasan cinco años, Mónica está trabajando juiciosa, mandándole plata a su mama y a su hija mientras llega el momento en que ellas también pueden venir y estar juntas otra vez. Para esto ella toma el siguiente paso para poder seguir con su sueño en este país, que es volverse residente. Al volverse residente ella trae a su hija y a su mamá el 12 de enero de 1998. Pasaron siete años y empezaron los trámites para poder volverse ciudadana. Hubieron algunos obstáculos que demoraron los trámites, por lo cual no le llegó la carta hasta el 2015. Ese día Mónica estaba en su casa viendo televisión haciendo lo que normalmente hace, pensando que iba a ser un día como cualquier otro, cuando su hija mayor agarra su correo del buzón. Su hija Mónica Irene grita, “¡Mamá! Mamá! ¡Te llegó la fecha para tu examen escrito para volverte ciudadana americana!”. Las dos gritaban y saltaban de la emoción. A los tres meses presentó su examen escrito y a los quince días le dieron fecha para el juramento y logró volverse ciudadana americana.
Este es un evento supremamente importante en la vida de Mónica y es un logro que le recuerda cada día que lo que ella se propone lo puede cumplir. Sus emociones estaban por todos lados al enterarse que se convertiría en ciudadana americana. Mirando hacia atrás ella recuerda sintiéndose alegre, agradecida, y emocionada ya que después de tantos años pudo lograr lo que tanto había luchado y anhelado. Después de ese logro tan inmenso se siente la mujer más afortunada. Su sueño siempre había sido volverse ciudadana y ahora al lograrlo se sintió realizada y muy agradable de ser parte de este país. Por su historia uno se da cuenta de que es una persona que lucha por sus sueños y no deja que algunos obstáculos le impidan no cumplirlos.