Mi nombre es Emely Palacio y este relato es sobre mí y de cómo me daba pena hablar inglés en público cuando todavía no me sentía cómoda hablando esta nueva lengua. El Lunes 15 de Septiembre del año 2017, cuando aún tenía 17 años de edad fue cuando tuve mi primera experiencia con un nuevo idioma. En ese entonces solo tenía 6 meses viviendo en los Estados Unidos, había empezado la secundaria y no estaba muy familiarizada del lugar o de la escuela.
Una mañana iba de camino a la secundaria y cuando me preparaba ya dentro de la estación en la 82 Jackson Heights para entrar, me percaté de que todos tenía una tarjeta para poder acceder el metro menos yo. No me había dado cuenta y tampoco quería preguntar porque no me sentía cómoda al principio.
Sin idea de cómo conseguir una o si me iba a dar a entender hablando inglés decidí acercarme al puesto y preguntar por ayuda. Mi nivel de ansiedad estaba muy alto por lo nerviosa que estaba en aquel momento. No sabía cómo decirle al señor que trabajaba para la MTA lo que necesitaba. Todo era causa del miedo y los nervios que sentía en aquel momento.
Al final le dije que no tenía metro card y que necesitaba llegar a la escuela en un inglés que seguramente sonaba como un bebe de 5 y me él me dejo pasar por la puerta.
Al llegar a la secundaria, les conté mi experiencia a mi maestra y compañeros en ambos idiomas, dándome a entender lo más que pude y la maestra estaba muy orgullosa de que me atreví a intentar a hablar inglés en público.
Luego, a la hora del receso, fui a buscar mi metro card de la escuela para que no me sucediera lo mismo otra vez.
También le conté a mi madrastra y me dijo que nunca me tengo que avergonzarme de lo que estoy aprendiendo.
Esta experiencia me ha servido hasta hoy casi 5 años después. Aprendí que no hay que tener miedo y que a veces hay que ser atrevidos y hacer las cosas que nos asustan un poco. Hoy, gracias a mi madrastra y maestra y gracias a que me atreví y que el señor del puesto no me ofendió ni me hizo sentir mal. Mi inglés es mejor y mi seguridad para hablarlo es más grande de lo que podía a ver sido si estos eventos hubiesen pasado de manera distinta.